Conociendo [Privado Alley]

Reí y me acerqué a el, cogiéndole del mentón y acercando mi boca a la suya. Soreí ampliamente y rocé nuestros labios, separándome después y girando para caminar.

-La cafetería está por aquí... -sonreí-

Tendria que estar totalmente rojo, sobretodo al notar como habia besado mis labios, aunque apenas fue un leve roce.
- E...¿Esta bien que hagas esto con un estudiante? -
Pregunte ignorando lo que decia sobre la cafeteria.

Le miré, medio dievrtido medio enfadado. Despacio, asentí con la cabeza.

-Eres mayor de edad, no es ilegal. Y tu mismo lo dijiste, solo son cuatro años

- No me refiero por la edad... Me refiero porque pensaran... -
Me avergonce tremendamente al intentar decir aquello.
- D-De que ando detras de ti por ser profesor...-
Finalmente diciendolo, notando todavia mis mejillas coloreadas.

Reí fuertemente, atrayendo varias miradas.

-¿Acaso importa? Si me gustas, me gustas y punto, me importan un bledo los demás -sonreí y me acerqué, estirando el brazo y acariciándole la mejilla-

- Pero... ¿No te diran algo el director o alguien? -
No queria ser un estorbo, o que le despidieran del trabajo por mi culpa.
- A-Aunque tampoco acepte nada...-

Me mordí el labio, pensativo.

-No creo... No, me imagino, no tiene derecho. En mi contrato no pone nada de relacioens con los alumnos. Además, ya me he tirado a otros antes -suspiré y le miré- aunque creo que tu eres muuuuy diferente

- ¿Te has liado con otros estudiantes? -
Pregunte un tanto sorprendido y arqueando mi ceja.
- Supongo... que eres de los que ligan con cualquier cara bonita... Aunque dices que soy diferente... ¿A que te refieres?-

-Si, no serías el primero, lo siento... -acerqué mi boca a su oreja y susurré- Me refiero a que cuando te he mirado por primera vez he sentido -cogí su mano- algo -la puse en mi pecho- aquí. Y era algo raro

Mire nerviosamente como tomaba mi mano y la ponia en su pecho, sintiendo mis mejillas arder levemente. Pase mi lengua por mis labios, intentando recuperar la compostura.
- ¿Y...Y eso que quiere decir? -

-Quiere decir que creo que estoy plenamente enamorado de ti...-sonreí y solté su mano-aunque casi no te conozca.

Me quede realmente sorprendido, jamas pense que iba a decir que estaba enamorado de mi... No me extrañaria si dijera que le gustaba,... pero enamorarse... me hacia sentir un tanto especial.
- ¿Y como fue que te enamoraste? -

-No lo sé, de verdad -reí- pero en las pelis y todo eso pasa así, de repente -le miré a los ojos, y, para mi sorpresa, le besé-

Me deje algo timidio, no estaba acostumbrado de que alguien se acercase a mi de aquella manera. Respondi el beso como pude, era un completo novato en esto. Pero inconscientemente, con una de mis manos le agarre la camisa, dejandome llevar.

Al notar sus brazos en mi cintura, inevitablemente gemi un poco dentro del beso, levantando los brazos y rodeandolo por el cuello, sin cortar el beso, intentando lograr respirar cada oportunidad, madienciendo la inexperiencia que tenia, pero aquello se sentia demasiado bien para pararlo.

Instintivamente abri los ojos al ver que nos moviamos, pero me llevo a un aula, que a mi parecer estaba vacia, pero nuestros labios no se separaron ni por un segundo, asi que igualmente cerre los ojos, llevando mis manos a su cuello, rodeandole y a la vez atrayendolo mas para besarlo mas todavia.

Me sorprendi al ver que se separaba de mi, pero me fije que comenzaba a desabrochar mi camisa, por lo que me asuste un poco, pero no sabia porque sabia que podia confiar en el. De nuevo se acerco a mi, besandome, pero esta vez iba con lengua, asi que abri la boca algo temeroso, intentando responder el beso de la misma manera que el.

Gemí de placer al meter mi lengua en su boca y le saqué la camisa.

-Aoi... te deseo... Por favor -le supliqué en un pequeño susurro-

Al escucharle hablar asi sentia que me podia derretir alli mismo, se veia tan sexy de aquella manera... ¿Como era posible...? Mi mente pensaba demasiadas cosas, pero todas se fueron cuando simplemente asenti abrazandome fuerte a el, y con una de mis piernas agarrandole por la cintura.

Le mordisqueé el cuello y me entretuve haciéndole un chupetón, para marcarle. Leugo, volví a sus labios, desabrochándole un poco el pantalón.

-Eres mío... -le susurré lascivamente en la oreja-

Gemia incesablemente notando como jugaba con mi cuello, se sentia como si estuviera en el paraíso, era demasiado bueno. Me estremeci al escucharle, intentado no caer al suelo ya que sentia como mis piernas se quedaban como si fuera gelatina. Me agarre fuertemente de sus hombros, mirando como me desabrochaba el pantalon, y hundi mi rostro en su cuello, dandole pequeños besos.

Cuando acabé de desabrocharle, metí una mano por su calzoncillo, y le agarré bien fuerte el pene.

-Te quiero, Aoi. Y no es ninguna mentira