Caminando... [Libre]

Desde que habia llegado a la ciudad, estaba cansado de todo el viaje, estaba harto de la ciudad, asi que decidi ir a la cascada, para meditar un rato, y de paso buscar algo de sangre de algun animal, ya que de humanos habia poco por la zona, o al menos eso pensaba.

De vez en cuando llevaba conmigo la cámara de mi hermano mayor, que era bastante buena, y fotografiaba cualquier cosa. Desde personas, hasta paisajes. Era una de mis mayores aficiones. Fui a la cascada, ya que no había hecho ninguna fotografía de aquél lugar. Me senté en la hierba, y empecé a sacar fotos. No noté la presencia de nadie más allí, aunque me pareciera extraño el hecho de estar solo.

Estaba tranquilamente cuando percibi el olor de un humano y eso llamo mi atencion. Tranquilamente, como si fuera paseando fui buscando a aquel humano. Al rato finalmente lo encontre, me fije que llevaba una camara fotografica.
- No espere encontrarme con gente por aqui...-

Yo tampoco esperaba encontrarme con nadie aquí, por muy extraño que me pareciera que estuviera solo. Pero durante el poco tiempo que llevaba allí, ya me había hecho a la idea de que no vendría nadie. Mala suposición.

Cuando oí una voz detrás de mí, pegué un pequeño respingo, un poco sobresaltado. Por suerte no le pasó nada a la cámara, pues iba colgada del cuello. Miré a quien me había hablado, sonriendo levemente.

-Tampoco pensé que habría alguien más aquí,- contesté, elevando los hombros.

Lo mire fijamente, apoyandome tranquilamente sobre el tronco de un arbol, sin apartar la mirada de el. El humano paracia un poco desconfiado, pero acepte el hecho de que eso era normal entre ellos.

- Siento molestar tu tiempo de tranquilidad en solitario...-

Bueno, un poco de compañía no venía mal. Desvié la vista, apagando la cámara, para luego volver a mirar al hombre que acababa de llegar. Me había pedido disculpas por molestarme.

-No te preocupes,- me encogí de hombros, -que estés aquí no impide que pueda seguir con lo que estaba haciendo.- Hice un ademán, restándole importancia al asunto.

¿A lo que estaba haciendo? Me acerque un poco mas a el y me fije en su camara.

- ¿Te dedicas a la fotografia o es un hobby? -

Le pregunte sin dejar de mirar a la camara, y luego mirar al chico humano.

-Es una afición,- contesté. Nunca se me había pasado por la cabeza dedicarme a la fotografía, a pesar de que me gustaría. Tenía en mente de seguir con el hobby en mis ratos libres, sin ánimo de lucro. Miré al chico, dándome cuenta de que no sabía cuál era su nombre.

-¿Cómo te llamas?- pregunté.

Lentamente asenti al escucharlo. Al poco pregunto por mi nombre y sonrei haciendo una leve reverencia con mi cabeza.

- Me llamo Morinaga Souji. ¿Y tu? -

Nunca había escuchado aquél nombre. Debía ser poco común. Imité su gesto, a modo de presentación.

- Me llamo Takeru Inoue.- Me levanté para que no tuviera que estar mirando hacia abajo durante la conversación.

(Ñeh, el calor afecta a mi creatividad >_<)

Al verlo levantarse me acerque mas a el esperando que no le molestase y extendi mi mano para que el la cogiera, o no, era opción de el.

- Un placer... ¿como deberia llamarte? -

Vi que extendió una mano. Se la estreché, soltándola al poco tiempo. Metí las manos en los bolsillos, escuchando su pregunta. Volví a elevar los hombros.

-Como quieras, no tengo ninguna preferencia.-

No es que conociera a toda la ciudad, ni mucho menos, pero Souji no me sonaba demasiado.

-¿Eres de aquí?- pregunté, curioso.

- Entonces llamemonos por nuestros nombres, llámame Souji, ademas es mas sencillo así.-

Me pregunto si era de por allí y negué con la cabeza.

- Llegue hoy a la ciudad... ¿y tu? -

Asentí, sonriendo levemente.

- De acuerdo, Souji.-

Dijo que acababa de llegar a la ciudad, y luego me preguntó.

-No, yo soy de aquí. A decir verdad, nunca he salido de la ciudad.-

Al escucharlo decir mi nombre sin pensarlo pasee mi lengua por mis labios, en signo de querer tomar algo de su sangre. Seguro que morder sus labios hasta hacer una herida que sangrara debía de ser totalmente delicioso.

- ¿No saliste de la ciudad? -

Contraje el ceño un poco al ver el gesto que había hecho. Bah, seguramente tendría los labios secos. Me preguntó si nunca había salido de la ciudad, como si no me hubiera oído bien.

- No. Siempre he estado aquí.-

Asenti levemente y mire a la cascada, y me pregunte si debería darme un chapuzón.

- ¿Vienes a refrescarte en el agua? Hoy hace calor.-

Le ofrecí cuando ya me comenzaba a desabrochar la camisa.

No estaba demasiado convencido. Bueno, claro que hacía calor. Refrescarme un poco no me vendría mal.
-Claro.- Metí la cámara en una mochila que había traído conmigo, la cual dejé en el suelo. Empecé a desabrocharme la camisa yo también, mirando al agua. Era difícil resistirse a pegarse un buen chapuzón.

((Ascooooooo de post x) Ñeh, haré como que no tiene ni idea de que es gay Puah xD))

Discretamente mire el torso desnudo de Takeru, se veia tremendamente hermoso, tenia un cuerpo bien formado, este humano seguro que ligaba mucho.
Me quite todo menos los boxers, por respeto, y me fui introduciendo dentro del agua.

Fui dejando la ropa junto a la mochila, dejándome únicamente los boxers, al igual que Souji. Fui hacia el agua, metiéndome poco a poco. Introduje la cabeza, y después volví a salir. Había merecido la pena el chapuzón.

- Creo que has tenido una buena idea,- comenté, sonriendo de lado.

Hice igual que Takeru, y finalmente meti mi cabeza dentro del agua. La ropa interior me molestaba asi que me la saque.

- Espero que no te importe...-

Dije alzando mis boxers y tirandolos a la orilla.

Me encogí de hombros. Bueno, estábamos entre hombres, ¿no? Aunque no lo admitiera, me producía algo de incomodidad. No sabía porqué, pero no le di importancia. Ni siquiera noté el leve rubor de mis mejillas.

-No, no me importa.- No creía que viniese nadie más.

Suspire algo entristecido, al parecer no le interesaba los hombres, pero la duda entro en mi al ver sus mejillas lindamente coloreadas.

- Está bien, si te molesta solo me lo dices.-

Me tumbe boca arriba en el agua, haciendome el muerto, mostrando claramente mi cuerpo.

Al mirar su cuerpo, finalmente acabé notando que mis mejillas ardían. Debían de haber adquirido un tono más notable que el anterior. No sabía porqué estaba sonrojándome. ¿Qué me estaba pasando? Fruncí el ceño y desvié la mirada, aunque a veces ésta volvía disimuladamente a Souji.

Sabia que el me miraba, pero no sabia si estaba avergonzado o era porque le gustaba, simplemente suspire y lo mire claramente, mostrandole una gran sonrisa.

- Se esta genial en el agua ¿eh? -